Hemodiálisis: A todos los pacientes del mundo

Wolendam (Holanda)

 "Lo mejor que podemos hacer por otro no es sólo compartir con él nuestras riquezas, sino mostrarle las suyas"

Disraeli, Benjamin

            Qué difícil es imaginar el sentimiento de aquel que está a nuestro lado. Difícil imaginar qué ronda por su cabeza y qué expectativas tiene de la vida. Difícil comprender qué situaciones conllevan a una persona a tener ciertos comportamientos. 
         Estas reflexiones quiero dedicarlas a mis pacientes, quienes reflejan, día a día, un afán de superación que sólo ellos pueden explicar.
         Ellos se levantan cada día con la esperanza de que éste será mejor que el anterior, con fuerzas para asistir de nuevo a su visita continuada a diálisis. 

         La hemodiálisis es un tratamiento sustitutivo de la enfermedad renal, desgraciadamente los pacientes que se someten a este tratamiento deben asistir, generalmente, tres días a la semana. A veces es necesario ampliar el tratamiento a cuatro o incluso seis días a la semana. 
         Cada día que acuden están unas 5 horas, ya que la sesión normalmente es de 4.
         Os podéis imaginar lo que significa esto? Difícil verdad? El día que asisten a su sesión permanecen en el hospital casi la mitad del día. El día que no asisten, a veces están tan cansados que les supone un sobreesfuerzo hacer alguna actividad.

         Por eso, cuando realizan su sesión es importante que no resulte una situación potencialmente estresante para el paciente. Desde aquí, quiero animarlos a que busquen un entretenimiento para "esas horas" en los que están conectados a la máquina. 

        Por supuesto, que cada persona afronta las situaciones de una manera distinta a otras. Hay quienes vienen con una sonrisa puesta, con la misma con la que se van. Hay quienes vienen un poco tristes, pero siempre intentamos que se vayan lo menos posible. Hay que se pasan la sesión durmiendo, bueno, espero que tengan dulces sueños. Hay que vienen contando sus "batallitas", no saben que están lidiando su mayor batalla. Hay que son chistosos, nos alegran el día, a nosotros y a ellos. Hay que vienen con inquietudes, no saben que todos las tenemos. Hay que vienen con preocupaciones, nosotros también las sufrimos. Hay que se interesan por tu vida, nosotros también queremos saber de la suya. En fin....podría nombrar muchísimas situaciones...

Desde aquí quiero animar a todos mis pacientes, a todos los pacientes del mundo, a que sigan adelante y se levanten cada día con una sonrisa. Como enfermera, quiero decirles que nosotros estamos con ellos en este camino tan largo y a veces tortuoso, que pueden contar con nosotros, que pueden contar conmigo...y por supuesto, yo cuento con ellos, cuento con vosotros.

Mariposa.